Comunicar el mensaje de Jesucristo a los miles de peruanos en una forma entendible y adecuada.
Ser un lugar donde los heridos, los deprimidos, los frustrados, los confundidos y los marginados pueden encontrar amor, aceptación, aliento, ayuda, esperanza, perdón y guía.
Dar la bienvenida a cientos de miembros integrándolos a la comunión de la familia de nuestras iglesias, amando, aprendiendo, riendo y viviendo unidos en armonía; satisfaciendo las necesidades espirituales, emocionales y materiales de cada uno.
Tener decenas de células, como parte principal del proceso de llevar a cada integrante a la madurez espiritual y emocional.
Guiar a los integrantes de nuestra familia a la madurez espiritual a través de la participación en los cultos en las células, en cursos bíblicos, en retiros y en estudios bíblicos-teológicos formales.
Preparar a cada creyente para un ministerio significativo ayudándole a descubrir los dones y talentos que Dios le ha dado.
Enviar a misioneros a lugares cercanos y/o lejanos para predicar la Palabra de Dios y/o apoyar en proyectos de desarrollo o de bienestar social; eso por tiempos limitados o como llamado de vida.
Fundar o ayudar a fundar iglesias hijas a nivel nacional e internacional.
Poder adquirir para cada iglesia establecida una propiedad que brinde las facilidades para los cultos de adoración, las células, el ministerio con niños, adolescentes y jóvenes, salones para estudios bíblicos, consejería y oración, y para poder atender las necesidades emocionales, espirituales y materiales de personas heridas y golpeadas por la vida.