Entendíamos que en esta Navidad recordamos la primera venida de Jesús y, con esta, el inicio del Reino de Dios en esta tierra; reino todavía no completo, pero ya iniciado. Anhelamos con firme expectativa la segunda venida de Jesús, en gloria y majestad para instalar la consumación del Reino de Dios en este universo. Es interesante ver que desde el AT el Espíritu Santo puso la expectativa de este reino en los corazones de los profetas, aunque esta expectativa no era tan clara y se esperaba una sola llegada del Mesías, realidad que en el NT se detalla y se aclara más, con las dos venidas de Él. Ahora entenderemos algunos textos del AT que señalan hacía la Nueva Tierra y los Nuevos Cielos.